Una escapada a Salas

Tras los días de temporal, un rayin de sol hace que salgamos de casa como los caracoles, y desde que escribo en el blog, éste me sirve de excusa para visitar y refrescar los recuerdos de esos lugares tan tan cercanos, que los pasamos de largo.

Así que, un domingo cualquiera, nos acercamos hasta Salas, a vermutear un poco y, de paso, pasear por sus calles.


No sé si es defecto profesional o simple costumbre, pero es llegar a un sitio y buscar con la mirada la Oficina de Turismo. En este caso, se encontraba cerca de donde aparcamos, y como no, tuve que acercarme. Está en el interior del Palacio de Valdés de Salas, cerrada, pero con un expositor donde encontré la información que buscaba: un mapa y un tríptico con los edificios singulares que nos íbamos a encontrar en nuestro paseo. Más que suficiente.



Salas tiene un núcleo muy cómodo para pasear. De origen medieval, su morfología está vinculada al Camino de Santiago, alargada y estrecha. Según vamos viendo los edificios señalados en el callejero, nos damos cuenta de toda la historia que esta pequeña localidad tiene, y de su importancia en otros tiempos. Y quizá el personaje más destacado sea Fernando de Valdés-Salas, entre otras muchas cosas, fundador de la Universidad de Oviedo, y promotor de la Colegiata Santa María la Mayor, aquí en Salas.


Como podéis ver, en este recorrido podemos visitar todos los monumentos y casonas más destacadas de Salas, un paseo que, partiendo de la plaza de La Campa, hace un recorrido circular muy agradable, relajado y en el que en poco tiempo, puedes ver muchas cosas: el Palacio de Valdés-Salas, la Torre medieval, la Colegiata de Santa María la Mayor, la Capilla de San Roque, el Palacio de la Condesa de Casares, el Parque Carmen Zulueta, o la Casa del Regente.






También nos acercamos hasta la ermita del Viso, desde donde se tienen unas panorámicas... bueno, las fotos que aquí tenéis no les hacen justicia. El 15 de agosto es cuando se celebra la fiesta de la Virgen del Viso, además de pasacalles, la misa y procesión, hay comida campestre (existe un área recreativa) amenizada con charangas (¡como nos gustan las fiestas de prao!). También es muy conocida la Subida al Viso, etapa clásica dentro de la Vuelta Ciclista a Asturias.



Antes de dejar la localidad, nos detuvimos a conocer el Tejo de Salas, un Monumento Natural, localizado en el cementerio de la localidad, junto a la Iglesia de San Martin, de origen prerrománico. Son árboles protegidos cuya edad es muy complicada de calcular. Su presencia en el entorno de ermitas e iglesias, hace que tengan cierto componente mágico.


Nos quedamos con ganas de más, cerca está Malleza y Cornellana, podemos visitar alguna braña (Pevidal, Buspol o Idarga), que para eso estamos en la Comarca Vaqueira. Volveremos.





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