Carnaval, Carnaval...

Pues aquí estoy, entre telas y agujas, y como siempre, me pilló el toro.. y ya estamos en Carnaval!! Planificar el disfraz, confeccionarlo (sin tener ni idea de corte y confección), comentando las jugadas con tus amig@s; o decidirlo en el último momento, coger cuatro cosas de casa y ¡Hala! a ponerse el mundo por montera. Son momentos divertidísimos y sólo el recordarlos hace que se me ponga la sonrisa en la cara.

Pocas veces he fallado a la cita y cuando lo he hecho ha sido por causas de fuerza mayor. Y sin duda, mis carnavales, mi ojito derecho son los que se celebran en Avilés, sobre todo el descenso de Galiana y ese sábado noche. 

El Descenso de Galiana es una fiesta de la espuma gigante, donde la Calle Galiana (junto con La Cámara) se convierte en un río por el que navegan carrozas realizadas expresamente para ese día, y con temática libre, aunque muchas se ciñen al tema que propone el Rey del Goxu y la Faba para ese año. En este 2014 el tema es la Edad de Piedra, así que habrá mucho cavernícola suelto. Hace tiempo que ya no participo, pero lo recuerdo como un fiestón donde gente de todas las edades se da cita para pasarlo bien.

Fotos: SergioLopez. El Comercio

Lo que tiene de especial este Carnaval es que las personas se transforman, el disfraz se apropia de la gente, que adquiere esa personalidad e interactúa con los demás sin complejos y con mucho sentido del humor. Puedes pararte sólo 5 minutos a comtemplar la pasarela de personajes y tienes suficiente inspiración para la próxima década. Hay gente que se lo curra mucho y que tiene una gran imaginación. 

                   

Pero no solo se disfruta el carnaval en las grandes ciudades, durante todo el mes de marzo, podemos ir de carnaval en carnaval, de desfile en desfile por las diferentes villas y pueblos asturianos, que estiran esta fecha y las ganas de pasarlo bien.

Este año viviré un carnaval diferente, quizá más tranquilo, pero con mucha ilusión y las mismas ganas de pasarlo bien, transformándome durante unas horas.